Opiniones sobre Restaurantes de Sevilla, provincias cercanas y algunos en el extranjero

Este es un blog donde pretendo dar mi humilde opinión sobre restaurantes, a los que suelo ir principalmente los fines de semana. Soy un especial admirador principalmente del jamón, gambas y chocolate, así como de los productos marinos. No soporto el queso. Soy de Sevilla y me gustaría que si encontraras un restaurante que te haya gustado, me lo hicieras saber. Gracias.

Nombre:
Lugar: Sevilla, Sevilla, Spain

24 noviembre 2008

Bodeguita La Alacena, Constantina, Sevilla

Buenas tapas. Sitio ideal para comer setas

La Bodeguita La Alacena está situada en el centro del pueblo, en una placita al principio de la calle Mesones. Los lugareños conocen a este bar como “El Parra”, que es el apellido del propietario. Es un local bastante pequeño, donde sólo caben, aparte de la barra, cuatro mesas, que además están bastante apretadas. Fuera también tiene otras cuatro mesas.

En La Bodeguita La Alacena sólo sirven tapas o raciones. No hay término medio. Las tapas cuestan 1,80 o 2 euros. Elegí el tapeo, porque además las tapas están bien despachadas. Elegí esta bodega porque iba buscando principalmente setas. Aquí pude probar dos tipos: Seta de álamo y Faisán de Jara. Me gustaron las dos, pero más la primera, de la que incluso repetí. Es un poco picante, pues le añaden algo de guindilla y pimienta molida.

El término “faisán” puede llevar a engaño, porque la mayoría de la gente piensa en el ave. Pero en realidad es una palabra que se utiliza en Córdoba y Sevilla para llamar a algunas setas (boletus). Además, en los bares puede verse el cartel de “Hay setas y faisanes”, lo que lleva a confusión.

Entre las tapas de La Alacena también destaca el “Lagartito frito”. Yo no me atreví. Es una tapa que sólo está al alcance de los estómagos más entrenados. Preferí en su lugar el pinchito de pollo y el jamón serrano.

En cuanto al vino, elegí un Rioja crianza llamado Azabache, que me pareció normalito.

En la bodeguita La Alacena no gastan mucho en tecnología, pues ni siquiera te dan la cuenta, sino que el camarero hace la típica suma en un papel y te lo dice de palabra. No es el método más adecuado, pero de todas maneras no me resultó caro. Siete tapas y tres copas de vino no llegaron a 20 €.

De postre no pedí nada, pues preferí ir a la Plaza de la Carretería, donde está el convento de las Jerónimas. Allí tienen gran variedad de dulces. No son baratos, pero todos son caseros y muy buenos.

21 noviembre 2008

Restaurante Cruz de Santiago, Calera de León, Badajoz

Comida tradicional extremeña a muy buen precio. Estupendas chacinas

El restaurante Cruz de Santiago está situado en el municipio de Calera de Léón, en la calle “Callejón del Agua, 12”. Para llegar a este callejón, hay que pasar por un arco de piedra bastante estrecho. Así que, si hay sitio, es conveniente dejar el coche en la plaza.

El restaurante pertenece a un hotel y es de tamaño medio. Al entrar encontramos una barra y algunas mesas alrededor. Este es el sitio ideal para tapear, ya que si entramos en el salón tendremos que pedir medias raciones o raciones. El salón es amplio pero las mesas están muy distanciadas entre sí, por lo que da la sensación de no aprovecharse bien el espacio. También hay poco mobiliario. Me dio la impresión de ser un salón nuevo y quizás lo estuvieran acondicionando. Tanto en la zona de la barra como en el salón-comedor hay grandes ventanales con vistas a la sierra de Tentudía.

La carta se centra principalmente en carnes, que es lo típico de la zona. De entrante pedi una ración de surtido ibérico (13 €). El surtido es un plato bastante bien despachado de chorizo ibérico, caña de lomo ibérica y, por supuesto, el extraordinario jamón ibérico. Magnífico plato, donde destaca el jamón, con sus manchitas blancas de grasa, delatadoras de calidad, y perfectamente cortado, que es algo que se agradece siempre.

Como plato principal me decanté por un plato de pluma ibérica con champiñones, servido en buena cantidad y en su punto. Para acompañarlo, qué mejor que una copita de vino de la zona: Monasterio de Tentudía (1,20 €).

En cuanto a los postres son caseros, aunque no había mucha variedad. Lo mejor me pareció la tarta de queso, sin desmerecer los profiteroles cubiertos de chocolate.

El servicio fue atento en todo momento.

A la hora de pedir la cuenta nos llevamos una sorpresa, pero positiva. El cubierto sale a unos 22 euros, café incluido (1,10 €).

Lo único que no me gustó fue que cobraron el pan (1,30), pero es un detalle sin importancia y, por desgracia, habitual.

Tlfno.: 924584014

11 noviembre 2008

Restaurante El Rinconcillo, Monesterio, Badajoz

Calidad pero regular servicio. Deliciosas setas.


El restaurante El Rinconcillo está en la travesía del pueblo, en el Paseo de Extremadura, 67. Se llama así porque el local está situado en un rincón de una especie de plaza.

Es un local de tamaño medio, con una barra y un pequeño comedor, con unas diez mesas, y otras cuatro cerca de la barra. También tiene una zona de veladores junto a la entrada.

La carta es bastante extensa. Monesterio es un pueblo famoso por sus chacinas y carnes, así que la elección estaba clara: como entrante, media ración de jamón ibérico (9 €), que resultó ser de extraordinaria calidad. En la carta no aparece la media ración, sino la ración (17 €). De todas formas, la media ración está bastante bien servida. Después elegí una presa ibérica a la plancha (11 €), en su punto perfecto. No obstante, también se podía elegir pescado, pero ya que se está en Monesterio, entiendo que hay que pedir carne.

En cuanto al vino, pedi vino de la casa, esperando quizás un Monasterio de Tentudía o algún otro vino de la zona, pero me ofrecieron Beronia, un Rioja al que nunca tengo el valor de rechazar.

Como fui en otoño, en época de setas, tuve la oportunidad de probar el “salteado de boletus edulis con jamón”, y la verdad es que me sorprendió su sabor. Las setas se ofrecen a la parrilla, cortada y con una deliciosa salsa, con taquitos de jamón. Un plato altamente recomendable. Después de probarlo dan ganas de interesarse por la micología: http://www.todacultura.com/micologia/boletusedulis.htm . Las setas suelen ser caras, bastante más de los 12 euros que aparecían en la carta de El Rinconcillo, por lo que me pareció un buen precio.

Otro plato fuerte de este restaurante son sus postres, que son caseros. No hay carta de postres, sino que el camarero suelta una pequeña retahíla de nombres. No es lo ideal, pero lo más importante es que los postres sean de calidad, y doy fe de que calidad tienen de sobra, como en el caso del flan de huevo (3,50 €) o el pastel de queso fresco con mango y grosellas (4 €), que me gustó hasta a mí, que soy antiquesero total.

El cubierto en El Rinconcillo sale a algo menos de 25 €, postres y café (1 €) incluido . Tienen el detalle de no cobrarte el pan, ni los cubiertos, ni las aceitunas que ofrece la casa al llegar. Esto es algo que debería ser habitual, pero en realidad cada día es más raro de ver.

El único aspecto negativo de este restaurante fue el servicio, que a pesar de que los camareros eran atentos, no daban abasto y tuvimos que esperar mucho hasta que nos atendieron. No sé si era una situación circunstancial o simplemente que ese día estaban desbordados, porque había mucha gente y poco personal. Como pienso volver otro día, ya tendré ocasión de comprobarlo.

El Rinconcillo tiene una completa página web: http://www.restaurantelrinconcillo.com donde incluso se ofrecen recetas y se puede consultar su completa carta.

***

En una segunda visita he podido comprobar que ha habido sustanciales diferencias. La principal es que, lamentablemente, ha subido de precio. Quizás, por ese motivo he notado bastante menos gente en el local. Eso conlleva que ya no está el local atestado de gente y, por tanto, no hay que esperar mucho para que te atiendan. Eso sí, la calidad no ha bajado ni un ápice.

De entrante pedí salmorejo. Muy bueno, pero excesivamente caro (6 €).

Me volví a decantar por las setas. En esta ocasión, el salteado de setas "amanita" con jamón (14 €). Sensacional. Tampoco desmerece el solomillo al moscatel con cebolla caramelizada (13'50 €). Para acompañarlos, elegí una copa de un Ribera del Duero (3 €).

Los postres siguen siendo igual de buenos, aunque, de nuevo, se nota una considerable subida en los precios --de más de un euro por postre en algún caso--. Muy buenos tanto el pastel de chocolate negro con naranja confitada, como el pastel de yogurt. Ambos a 5 €.

Ya sí cobran el pan (0'80 € /comensal), pero, por contra, tuvieron el detalle de invitar a un licor tras el postre.

En fin, una pena la subida de precios, pero aún así, considero que sigue siendo un buen sitio para comer.


Tlfnos: 924 517 001 y 615 257 349

E-mail: info@restaurantelrinconcillo.com