Opiniones sobre Restaurantes de Sevilla, provincias cercanas y algunos en el extranjero

Este es un blog donde pretendo dar mi humilde opinión sobre restaurantes, a los que suelo ir principalmente los fines de semana. Soy un especial admirador principalmente del jamón, gambas y chocolate, así como de los productos marinos. No soporto el queso. Soy de Sevilla y me gustaría que si encontraras un restaurante que te haya gustado, me lo hicieras saber. Gracias.

Nombre:
Lugar: Sevilla, Sevilla, Spain

26 septiembre 2007

Restaurante UMA, Lisboa, Portugal

Lujo cutre.

El restaurante UMA está situado muy cerca del elevador de Santa Justa, en la Rua Dos Sapateiros.

UMA es un local pequeño, con una barra y sólo unas ocho mesas, aproximadamente, y suele estar lleno. En el local hay un letrero donde se jactan de tener un arroz que ha sido premiado por su calidad. Y, desde luego, doy fe de que ese arroz merece un premio. Es simplemente extraordinario, probablemente el mejor que he probado junto con el de El Roqueo, en Conil de la Frontera.

Un detalle que no pasa desapercibido es que en todas, absolutamente todas las mesas habían pedido una olla de arroz. En cada una de estas ollas hay arroz más que suficiente para dos personas. Y, por supuesto, el marisco es muy abundante y está preparado para que sea más fácil de partir. El precio de la olla es de 20 €.

De beber, para acompañar el arroz, la casa me recomendó una botella de vino blanco llamada Planalto, del Douro, reserva del 2006. Y fue una buena recomendación.

En definitiva, UMA es un restaurante frecuentado por portugueses principalmente, de aspecto bastante cutre y pequeño, pero donde se come muy bien y a un precio magnífico, pues dos personas pueden comer hasta hartarse por unos 35 €, incluido IVA y los aperitivos que suelen ofrecer en los restaurantes portugueses.

20 septiembre 2007

Restaurante À Minha Maneira, Lisboa, Portugal

Restaurante acogedor, donde se come muy bien y barato.

En Lisboa hay dos restaurantes À Minha Maneira, uno situado en la Rua Cais de Santarém, 2 y otro en Largo do Terreiro do Trigo, 1. Yo estuve en el primero, situado no muy lejos de la Plaza del Comercio.

Es un local de tamaño medio, con una original decoración --ver página web-- y con veladores en el exterior. No había mucha gente porque llegué bastante tarde, sobre las 15 h. Y cerraban a las 15.30. Me dio la impresión de ser un negocio familiar. El dueño es muy amable y atento. Además habla español. Como curiosidad, tuvo el gracioso detalle de preguntarnos la nacionalidad, y resultó que era para plantar una banderita española en la mesa.

Las especialidades de la casa son el bacalao, marisco y filetes de Róbalo, así como diversos tipos de carne (con setas, a la portuguesa...). Yo me decanté por una ensalada de atún y como segundo pollo al curry (frango do caril), que me gustó mucho. Para acompañar el pollo elegí media botella del vino de la casa, que resultó ser un vino regional de Terras do Sado llamado Fonte do Nico, que me pareció excelente.

No pedí postre porque acabé bastante harto, pero me da la impresión de que hubiera estado a la altura de lo que ya había probado.

Pero, sobre todo, lo que más me gustó fue el precio. Es difícil encontrar ya un sitio donde dos personas pueden comer bien por 22,55 €.

Para finalizar, una advertencia. En los servicios tienen uno de esos WC con tecnología japonesa ultramoderna, con botones tan originales como "shower", "bidet" y "dry", además de poder regular la fuerza y temperatura del agua. Vamos, todo un alarde de tecnología. Al lado hay un letrero, que no recuerdo si está en inglés o portugués, avisando de que, si se va a utilizar el aparatito, se haga sentado. Dicho letrero no está por gusto, sino porque si se da, por ejemplo, al botón "shower", sin estar sentado, por lo visto, sale un artilugio propio del Inspector Gadget, que emite un chorro de agua con tal fuerza que es capaz de anegar el servicio en cuestión de segundos.

En definitiva, el restaurante À Minha Maneira es uno de esos sitios a donde volvería sin pensarlo, porque aúna calidad, buen precio y excepcional servicio.

Tlfno: 218861112
Web: www.a-minha-maneira.pt
E-mail: info@a-minha-maneira.pt

19 septiembre 2007

Restaurante Martinho Da Arcada, Lisboa

Se come bien, pero es algo caro.

Martinho Da Arcada está situado en la Plaza del Comercio, nº 3, bajo los arcos o soportales. Es un local bastante amplio, aunque yo me puse en los veladores de la plaza. Se supone que es el restaurante más antiguo de Lisboa y se convirtió en la oficina improvisada del escritor Fernando Pessoa. Según dicen, en el restaurante todavia se conserva su mesa con su taza de cafe, una copa de aguardiente y varios libros. Ademas tiene muchas fotos de el en las paredes y recuerdos curiosos como un poema escrito en un menú con el que pagó la cena.

De entrada te intentan poner el típico conjunto de foie-gras y quesos, que yo normalmente rechazo porque, si no, se dispara la cuenta, al no ser nada baratos. En su lugar pedí melón con jamón.

La carta es bastante amplia, pero la especialidad de este restaurante son los pescados. Deliciosos tanto la dorada como el lenguado. Allí mismo, delante del cliente, los camareros le quitan las espinas con gran habilidad.

Para acompañar el pescado pedí vino de la casa, y ofrecieron un vino blanco de la región de Estremadura (Portugal), llamado Rimor, del 2006. La verdad es que era magnífico, y casi no me importó la jugarreta de un camarero, que además se la daba de gracioso. La jugarreta consistió en que pedí dos copas de vino e hizo como el que me entendió, y después trajo una botella. Cuando se lo dije, aclaró que sólo se servían botellas. Tampoco tiene demasiada importancia por la calidad del vino, pero no me gustó la jugada.

Los postres son bastante buenos. Recomiendo tanto la Tarte Amendoa (tarta de almendras) como el Bolo de Chocolate. Muy buenos los dos.

Del servicio no me llevé muy buena impresión, en parte por el camarero graciosillo y en parte también porque, a pesar de que había un buen número de camareros, eran bastante lentos al servir.

En resumen, creo que Martinho Da Arcada es un buen restaurante, se come bien, pero es algo caro --alrededor de 70 euros dos personas-- quizás aprovechando su historia y su antiguo cliente Pessoa. La verdad es que en Lisboa hay sitios donde se come igual de bien o mejor y son más baratos.

13 septiembre 2007

Restaurante Tulhas, Sintra, Portugal

Buena comida a buen precio.

Tulhas está en la preciosa localidad portuguesa de Sintra. Es un local no muy grande, situado céntricamente, en la Rua Gil Vicente 4-6 y está decorado en estilo rústico, destacando un gran azulejo en una de sus paredes. Me costó algo dar con la calle, posiblemente porque mi mapa no era muy bueno. Está situado en una calle estrecha, y está cercano al Palacio Nacional de Sintra y a una de las oficinas de turismo de Sintra.

A pesar de que el local no es grande, como fui entre semana, no tuve ningún problema para conseguir mesa. Tulhas se dedica a la comida tradicional portuguesa, destacando los pescados y en concreto el bacalao. Aunque tengo que reconocer que el bacalao era bastante sabroso, yo me decanté por un sargo, que es un pez parecido a la dorada aunque con algo más de espinas.

En cuanto al vino, no es que tengan una gran bodega, pero es más que suficiente para mi. No tenían un vino blanco que me gusta, llamado Reguengos, y me ofrecieron en su lugar otro vino alentejano que no tenía nada que envidiarle: Porta de Ravessa.

El personal es muy atento y amable, y además hablan español.

En cuanto al precio, me pareció bastante bueno. Dos personas pueden comer por unos 30 euros, incluyendo: pan, ensalada mixta, dos platos, media botella de vino y agua. No pedimos postre porque los platos estaban bien servidos.

En definitiva, un sitio que recomendaría sin ninguna duda.

Cierran los miércoles
Tlfno: 21 9232378

06 septiembre 2007

Restaurante Concha D'ouro, Lisboa

Amplio y lujoso local con muy buen marisco.

El restaurante y cervecería Concha D'ouro está situado en pleno centro de Lisboa, en Rua Augusta, 238-240. Es un llamativo local, de varias plantas, amplio y lujoso, con un auténtico batallón de camareros, implecablemente vestidos, preparados para servir. A pesar de las dimensiones del local, tuve que esperar cola, aunque afortunadamente no fue mucho tiempo.

Concha D'ouro se dedica a la comida portuguesa e internacional. Tiene viveros propios, lo que le permite tener el pescado y el marisco siempre fresco. Entre sus especialidades está el bacalao, mariscadas para dos personas, arroz de marisco, parrillada de peces, cataplanas y espetadas (brochetas).

Después de mucho pensarlo, dada la gran variedad del menú, me decanté por una ensalada de atún como entrante y una cataplana de marisco para dos personas. La cataplana es bastante impresionante porque la sirven transportada en un carrito, en una especie de olla que está totalmente llena de marisco. Lo suficientemente llena como para hartar a dos personas. De hecho no dejamos hueco en los estómagos para el postre.

En cuanto a la carta de vinos, hay mucho donde elegir. Yo escogí media botella de un delicioso vino blanco regional del Alentejo, llamado Monte Velho, cosecha 2005.

En Concha D'ouro también ofrecen, como es costumbre en Portugal, el tradicional entrante consistente en aceitunas, queso y patés. Es importante hacer notar que todo esto, que un español podría suponer que es un ofrecimiento de la casa, puesto que lo ponen ellos sin que haya petición previa, en caso de que no se les diga que lo retiren expresamente, lo cobrarán. Y bastante bien cobrado. En este local ascendió a 5,50€, pero en otros puede ser superior. Eso sí, los queseros apreciarán sobremanera el queso de oveja curado de Concha D'ouro.

Al servir la cataplana de marisco también dan un babero, que incluso te pone el camarero algunas veces. Aunque al principio pueda parecer un detalle gracioso, recomiendo utilizarlo, pues es muy fácil que salte caldo al intentar trocear el marisco.

Teniendo en cuenta el local y la calidad del marisco, considero que está bien de precio, aunque hay que hacerse cargo de que, como mínimo, una comida para dos sale a 60 €. Por supuesto, también depende de lo que se pida, porque el precio del bogavante, como siempre, es prohibitivo para la mayoría de los bolsillos.

Concha D'ouro está abierto todos los días hasta la 1 de la mañana, lo cual es muy útil porque a veces en el extranjero es difícil encontrar locales que estén abiertos tan tarde.

En definitiva creo que Concha D'ouro es un buen restaurante para darse un capricho y hartarse de marisco.

Tlfno: 213428369
Fax: 213223023
e-mail: conchadouro@sapo.pt

Restaurante Nilo, Lisboa

Buena comida, aunque el local deja de desear.

El Restaurante Nilo está situado en Rua dos Correeiros 217-219, un lugar bastante céntrico. El local es pequeño y un poco incómodo, pues las mesas están algo juntas. Hay veladores fuera, pero estaban ocupados y tuve que pasar al interior. No es un sitio lujoso, ni mucho menos, pero se come bien y a un precio bastante bueno. Dos personas pueden comer bien, sin postre, por poco más de 30 euros.

Nilo sirve comida típica portuguesa, con productos frescos y de calidad, y en su menú se pueden encontrar platos como bacalao salado, arroz de marisco (caldoso), carne de cerdo a la alentejana y al algarve, pescados del dia...

De entrante pedí una ensalada de atún, de buen tamaño y bien servida de atún, que al fin y al cabo es lo más importante. Y como plato principal me decidí por pescado, concretamente por un lenguado a la plancha --también de buen tamaño--. También me pareció buena elección el pez espada, muy bien servido de nuevo.

Para acompañar el lenguado escogí un vino blanco, que me pareció bastante bueno, llamado Borba.

No pedí postre porque le eché el ojo a la Pastelaria Suiça, situada en Praça D. Pedro IV (más conocida como Rossio), donde tienen una buena selección de irresistibles tartas y pasteles. Esta pastelería es bastante frecuentada, y con razón.

El servicio me pareció bueno. Como anécdota, el camarero que me descorchó la botella era muy joven. Supongo que recien estrenaba trabajo, puesto que tuvo muchas dificultades para descorchar la botella. Tantas dificultades, que lo tuvo que hacer su jefa, que estaba al quite.

En general, Nilo me pareció un buen restaurante para comer y bastante barato. No es muy local muy vistoso y no llama la atención. Es más frecuentado por lisboetas que por turistas.