Restaurante A Grelha, Fátima, Portugal
Bueno, bonito y barato. Sitios como el restaurante A Grelha son difíciles o más bien imposibles de encontrar en España.
El restaurante A Grelha fue fundado en 1981. Está situado estratégicamente, pues está a un corto paseo tanto del santuario de Fátima como de las afueras de la ciudad, a pocos kilómetros de la autopista A1, que va de Oporto a Lisboa. Lo encontraremos en la Rua Jacinta Marto, 78. Es un local de tamaño medio, pero no tuve problemas para encontrar mesa, probablemente porque iba a comer a la hora española.
El salón está decorado con gusto, en estilo rural, llamando la atención las particulares lámparas, que son, en realidad, cestos de mimbres boca abajo.
Al empezar, los típicos ofrecimientos que hacen en Portugal: queso, aceitunas y mantequilla. Yo sólo acepté las aceitunas (1,25 €). También pedí una ensalada (3 €). El pan lo ofrecen en un cestito de mimbre y cobran por él 1'50 €. No cobran el pan por comensal, como hacen en otros sitios.
La especialidad de A Grelha, como su propio nombre indica, son los grelhados. O sea, carne a la parrilla. Así que lo mejor era probar esas carnes, que estaban muy jugosas y en su punto, con abundante guarnición, ya sea de verduras o patatas fritas. Sensacional, por ejemplo la "Carne a portuguesa", que es un plato típico portugués, de carne de cerdo en salsa. O también los "Lombinhos de porco preto" (12,75 €), que son lomos de cerdo ibérico a la plancha. Tampoco están nada mal los filetes de merluza (8'50 €), que sirven con guarnición de arroz hervido y ensalada.
En cuanto al vino, no me mareé mucho la cabeza y pedí media botella del vino de la casa, que resultó ser un vino llamado Colegiada, de Estremadura, de la cercana población de Ourém, cosecha 2008. Probé tanto el vino blanco como el tinto. Ambos me gustaron bastante. Las dos variedades tienen el mismo precio: 3,25 € la media botella.
En cuanto a los postres, es altamente recomendable la especialidad de la casa, que es el pudín de almendras (3 €). Buenísimo.
En A Grelha también el café es de calidad, de la marca chave d'ouro (llave de oro). Posiblemente de los mejores que haya probado, y además no era muy caro: 1,25 €.
Mención aparte merece el personal, muy atento y amable siempre. Hablan español, aunque no con fluidez, pero sí lo suficientemente bien como para que el idioma no sea un problema.
En resumen, A Grelha me pareció un gran restaurante, pues es un sitio donde se come muy bien y a un precio excelente, ya que el cubierto sale entre 15 y 20 euros, con café y postre incluido. Todo en A Grelha es servido en abundancia. Allí el que se queda con hambre es porque quiere.
Por buscar algo negativo, sólo se me ocurre que la carta no es muy extensa, pero, para mi gusto, más que suficiente.
Este restaurante me ha gustado tanto que fui en dos ocasiones durante mi corta estancia en Fátima, y si pudiese, volvería de nuevo.
Cierra los jueves (quintas-feiras)
Tlfno.: 249531633
Fax: 249531306
E-mail: agrelha@iol.pt
El restaurante A Grelha fue fundado en 1981. Está situado estratégicamente, pues está a un corto paseo tanto del santuario de Fátima como de las afueras de la ciudad, a pocos kilómetros de la autopista A1, que va de Oporto a Lisboa. Lo encontraremos en la Rua Jacinta Marto, 78. Es un local de tamaño medio, pero no tuve problemas para encontrar mesa, probablemente porque iba a comer a la hora española.
El salón está decorado con gusto, en estilo rural, llamando la atención las particulares lámparas, que son, en realidad, cestos de mimbres boca abajo.
Al empezar, los típicos ofrecimientos que hacen en Portugal: queso, aceitunas y mantequilla. Yo sólo acepté las aceitunas (1,25 €). También pedí una ensalada (3 €). El pan lo ofrecen en un cestito de mimbre y cobran por él 1'50 €. No cobran el pan por comensal, como hacen en otros sitios.
La especialidad de A Grelha, como su propio nombre indica, son los grelhados. O sea, carne a la parrilla. Así que lo mejor era probar esas carnes, que estaban muy jugosas y en su punto, con abundante guarnición, ya sea de verduras o patatas fritas. Sensacional, por ejemplo la "Carne a portuguesa", que es un plato típico portugués, de carne de cerdo en salsa. O también los "Lombinhos de porco preto" (12,75 €), que son lomos de cerdo ibérico a la plancha. Tampoco están nada mal los filetes de merluza (8'50 €), que sirven con guarnición de arroz hervido y ensalada.
En cuanto al vino, no me mareé mucho la cabeza y pedí media botella del vino de la casa, que resultó ser un vino llamado Colegiada, de Estremadura, de la cercana población de Ourém, cosecha 2008. Probé tanto el vino blanco como el tinto. Ambos me gustaron bastante. Las dos variedades tienen el mismo precio: 3,25 € la media botella.
En cuanto a los postres, es altamente recomendable la especialidad de la casa, que es el pudín de almendras (3 €). Buenísimo.
En A Grelha también el café es de calidad, de la marca chave d'ouro (llave de oro). Posiblemente de los mejores que haya probado, y además no era muy caro: 1,25 €.
Mención aparte merece el personal, muy atento y amable siempre. Hablan español, aunque no con fluidez, pero sí lo suficientemente bien como para que el idioma no sea un problema.
En resumen, A Grelha me pareció un gran restaurante, pues es un sitio donde se come muy bien y a un precio excelente, ya que el cubierto sale entre 15 y 20 euros, con café y postre incluido. Todo en A Grelha es servido en abundancia. Allí el que se queda con hambre es porque quiere.
Por buscar algo negativo, sólo se me ocurre que la carta no es muy extensa, pero, para mi gusto, más que suficiente.
Este restaurante me ha gustado tanto que fui en dos ocasiones durante mi corta estancia en Fátima, y si pudiese, volvería de nuevo.
Cierra los jueves (quintas-feiras)
Tlfno.: 249531633
Fax: 249531306
E-mail: agrelha@iol.pt
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